Esta villa de estilo mediterráneo en Moraira es un verdadero refugio, situado en una parcela llana de casi 900 m² en la cima de una colina que otorga hermosas vistas abiertas del mar, Cabo de Moraira, y la costa circundante. La posición elevada garantiza la privacidad de sus terrazas y zona de la piscina, mientras que ser sólo un corto trayecto en coche de las playas de Moraira, animado puerto deportivo, supermercados y restaurantes.
Diseñada en dos niveles, la villa ofrece espacio tanto para la vida familiar como para el entretenimiento. La planta principal cuenta con un luminoso salón-comedor con chimenea, un cuarto de baño con ducha, y un espacio abierto listo para convertirse en el corazón del hogar: una cocina preparada con preinstalaciones completas. Esto permite a los nuevos propietarios la oportunidad única de diseñar y personalizar una cocina perfectamente adaptada a su estilo de vida.
En el mismo nivel, un apartamento conectado pero independiente ofrece una flexibilidad excepcional. Con su propia puerta de entrada de madera antigua restaurada, esta zona incluye un salón-comedor que podría servir como dormitorio principal, espacio preinstalado para una segunda cocina o un generoso vestidor, otro dormitorio y un cuarto de baño, ideal para invitados, familia extensa o incluso para uso privado de alquiler.
En la planta superior, dos dormitorios adicionales comparten un cuarto de baño y una terraza solarium con vistas panorámicas al mar. Casi todas las estancias importantes de la villa tienen vistas al mar, a la piscina y al jardín. En el exterior, la piscina privada de forma irregular con ducha exterior y el jardín de bajo mantenimiento con riego automático crean un oasis mediterráneo, bellamente complementado por la iluminación regulable que da vida a la casa por las noches.
Los acabados de calidad incluyen ventanas de aluminio efecto madera con acristalamiento de seguridad, armarios empotrados, persianas motorizadas, mosquiteras, calefacción por radiadores y una puerta de entrada automática con aparcamiento.
La ubicación une lo mejor de Moraira y la Costa Blanca, ofreciendo playas galardonadas, pintorescos paseos costeros, golf, deportes acuáticos y un estilo de vida cosmopolita pero relajado.
Esta villa es más que una casa: es una oportunidad para disfrutar de la vida mediterránea con vistas al mar, privacidad y la oportunidad de añadir su toque personal.
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